Borja Iglesias es uno de esos casos que no tienen explicación en el mundo del fútbol. Un delantero que pasa a ser de los mejores futbolistas que hay en España y de los máximos goleadores, a no ser capaz de dar ni una existencia ni marcar ningún gol en uno de los equipos más ofensivos de la historia, el Bayer Leverkusen.
En el Real Betis no estaba aportando absolutamente nada, tenía minutos salía pero no aportaba nada, nigole ni asistencia ni colaboraba en el juego grupal del equipo. Pellegrini para esos contundente, si no aportas, aparta. Lo decidió ceder al equipo alemán, con una opción de compra de ocho millones de euros, que obviamente no van a ejecutar.
A pesar de su lamentable temporada, sigue teniendo buen mercado, parece ser que hay esperanza en algunos clubes que vuelva a recuperar el olfato goleador. Si bien es cierto que es un futbolista de rachas y que es muy importante que esté bien anímicamente para que de rendimiento, por lo que no hay que descartar que vuelva a ser al menos la mitad de lo que fue.
También se encuentra bastante más cómodo en Alemania y más feliz. La cultura allí es diferente, y no se trata a los futbolistas de la misma forma. Recibe menos presión social, ya que aquí en España le gusta siempre dar sus opiniones en redes sociales y recibe palos por ellos. Tiene una oferta formal del Stuttgart, y a falta de acuerdo con el Real Betis, él ya habría dado al sí.