Evidentemente, Antonio Cordón está ante uno de los mayores retos de toda su carrera. Ficha por un equipo que tiene una masa social impresionante, está viviendo unos momentos muy difíciles y necesita ayuda de verdad.
La semana pasada fue presentado como nuevo director de fútbol del Sevilla, y dejó claro que lo primero que tenía que hacer, era subsanar algunos problemas con algunos futbolistas de la primera plantilla.
Según las diversas informaciones que conocemos, él nunca ha tenido ningún problema con nadie en el mundo del fútbol, uno de los motivos es su franqueza y sinceridad.
Es por ello que tres futbolistas que estuvieron la temporada pasada en la plantilla y dos de ellos siguen teniendo contrato, han recibido la comunicación por parte de Cordón, que no se cuenta con ellos.
El primero de los casos, es el portero Álvaro Fernández, que tiene contrato con el Sevilla porque Víctor Orta decidió de renovarlo dos temporadas más. No es un contrato muy importante, por lo que se podría llegar a un acuerdo de rescisión de contrato, y que se vaya libre a cualquier club. O bien que se estipule una cesión.
Marcao, el futbolista brasileño ha demostrado no estar en las condiciones físicas ni mentales aptas para jugar en la élite, por lo que se le ha transmitido que como hizo primero García Pimienta y después Joaquín Caparrós, no va a jugar. El brasileño está abierto a salir, siempre y cuando le den unas condiciones económicas interesantes.
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Saúl Ñíguez, todavía tiene algunos días de contrato con el Sevilla, pero ya Víctor Orta habló con él para comentarle que no sus caminos se separaban, una decisión que también mantendrá Antonio Cordón, a pesar de que su representante lo ha vuelto a ofrecer.