Increíble lo ocurrido ayer en el Ramón Sánchez Pizjuán fue una auténtica locura, de verdad fue un auténtico manicomio. El sonido del estadio era atronador y en ciertos momentos del partido los jugadores de la Juventus huían de la pelota, simplemente un infierno.
Los sevillistas en volandas al equipo y aunque realmente mereció bastante antes pasar a la final, se consiguió en la prórroga y con un rato con diez jugadores, lo que lo hace más épico todavía. La cita el 31 de mayo frente a la Roma de José Mourinho, en el Puskas Arena de Budapest.
El equipo está entrenando ahora mismo en las instalaciones de la ciudad deportiva del Sevilla FC, nadie trabaja sobre el césped, los titulares hacen ejercicios de recuperación en el gimnasio. Entrenarán sólo mañana previo al derbi del domingo. Muy pendientes de los tocados, Suso, Ocampos, Acuña, Badé…