El Sevilla FC ha vuelto a caer derrotado en el Santiago Bernabéu, como siempre cuando visita el estadio del Real Madrid. El equipo de Quique Sánchez Flores aguantó lo que pudo, pero se veía venir que antes o después llegaría el gol de los blancos.
Quique Sánchez Flores ha sido el señalado por la afición sevillista por los diabólicos cambios que ha perpetrado. Suso, Alejo Velíz, Juanlu y los inexplicables de Nianzou y Januzaj, han sido objetivo de críticas.
Pero hay que dar valor a lo que el técnico está haciendo, ya que se encontró a un equipo completamente muerto y lo tiene a 6 puntos del descenso. El encuentro del sábado en el Ramón Sánchez Pizjuán contra la Real Sociedad es clave.
Extrañó bastante el cambio de Isaac Romero, que estaba siendo el jugador más peligroso del equipo arriba. Lo cierto es que cuando se acercaba el Sevilla arriba, solo Isaac Romero daba sensación de poder hacer algo. De hecho fue el protagonista del pase a En-Nesyri, que casi se convierte en gol, y de la parada espectacular de Lunin en la segunda parte.
Según informa Víctor Fernández, el cuerpo técnico está tomando precauciones con él. En cuanto a nivel, no está notando el salto de tres categorías, pero físicamente si, y está muy al límite físicamente, hay que dosificarlo porque se expone a un riesgo de lesión muy alto. Acaba exhausto los partidos y ya ha estado en varias ocasiones con sus músculos al borde de romperse.