El Sevilla FC está ya prácticamente de vacaciones. Quique Sánchez Flores va a tener la difícil tarea de tener conectados a los jugadores sabiendo que ya no se juegan absolutamente nada más que el orgullo y acabar bien la temporada.
El trabajo del técnico madrileño ha sido impresionante, el equipo estaba completamente muerto, con un pie en segunda división, y ha conseguido salvar al equipo a falta de bastantes jornadas, parece poco, pero es mucho.
Fernando Reyes, ex futbolista del Sevilla y ahora en su país, dijo esto ayer en Canal Sur Radio:
«Fueron cuatro años y medio de mucha alegría. Mi familia disfrutó muchísimo y lo echamos mucho de menos. Mis hijos están siempre preguntando cuándo vamos a volver. Tengo dos años de contrato, pero echamos de menos Sevilla».
«Estábamos peleando por cosas que no me gustan. Nuestra plantilla no tenía para competir por lo de arriba. Tenía problemas de familia, no luchabamos por lo que quería y decidí salir y fue de una forma bonita. No fue por la puerta pequeña».
«Yo no esperaba pasar por todo lo que pasé y pelear por el descenso. Fueron tres años espectaculares, el cuarto muy complicado y la quinta temporada seguiamos abajo de la tabla y no me gustaba. El Sevilla no puede estar pasando por eso. Es un momento de reformulación y es necesario para que vuelva a ser un equipo muy fuerte y competitivo».
«Hay que tener una plantilla competitiva, un buen entrenador que ponga en la cabeza de los jugadores que hay que competir. Estuvimos así con Lopetegui, era muy competitivo, estaba allí de las 8 a las 17 y tenía a mucha gente que quería pelear. Es difícil, el Sevilla va a tener que trabajar mucho. No es sólo buenos jugadores, hace falta jugadores que tienen que competir».
«Empecé a ver que las cosas no iban a salir bien. No había la mentalidad de antes de competir.Había muchos jugadores a los que les daba igual ganar o perder y pensé que no podía continuar así. Yo quería competir y ganar cosas. Había momentos en que perdíamos partidos y daba igual, había sonrisas».