El pasado lunes, fuimos testigos una vez más, de lo que el Sevilla FC se ha convertido, un auténtico circo. La imagen de club está quedando muy tocada después de la constante lucha sin cuartel entre Del Nido Benavente y su hijo.
Prestamos, ruina económica, comisiones, decisiones a golpe de estímulo, entrenadores y finiquitos, peleas entre entrenadores y jugadores…una auténtica verbena constante.
El club, ante la falta de capacidad y de autoridad que está teniendo, además del desconocimiento en muchos temas relacionados con la gestión de un grupo de jugadores, ha tomado la decisión de que en el momento en que se asegure la permanencia, ir a por un entrenador al que darle las llaves y la gestión del club.
La desconfianza en el director deportivo, aunque no se hace pública, es palpable dentro de la entidad, estarían decididos a tomar las riendas y firmar a Maurizio Sarri de cara a la temporada que viene.
El técnico italiano tiene bastante experiencia, en equipos como Juventus, Chelsea, Lazio y Nápoles. El Sevilla FC invertiría una cantidad importante del préstamo que ha recibido en el nuevo entrenador, confiarían en él para un proyecto a largo plazo, yendo poco a poco y dándole capacidad de decisión en la planificación deportiva.