El Real Betis Balompié y sobre todo su entrenador, Manuel Pellegrini, decidieron apostar por Isco Alarcón. El malagueño habló con el Ingeniero, y tenía claro que podía recuperar el nivel que tuvo en el Real Madrid los primeros años y en el Málaga.
En un principio, en el club no lo tenían claro, pero si Manuel Pellegrini lo dice, va a misa, y tampoco era tanto riesgo, lo firmaron solo una temporada y con un sueldo de un millón neto más algunas variables por objetivos, goles, asistencias…
Ya en los primeros encuentros, la entidad vio que el jugador estaba completamente comprometido con el equipo y que el chileno sacaría lo máximo de él, ahí se produjeron los primeros contactos para tratar su futuro.
Informa José Manuel Oliva en ‘Deportes Cope Sevilla’, que el acuerdo entre las partes, está apunto de producirse, las negociaciones están en el punto final y los puntos más importantes están ya resueltos o muy cercanos. La ofertas del Betis fue en principio rechazada y la contraoferta de sus agentes ha sido modificada y adaptada a las posibilidades del club, se ha llegado a una solución intermedia.
Añade Andrés Ocaña que se estarían discutiendo algunos pormenores del contrato, el Betis quiere atarlo hasta 2026, pero Isco quiere tener una ventana en 2025, por si le llega una oferta millonaria de Arabia o de algún destino para un retiro dorado.
El salario se verá aumentado de forma importante y pasará a cobrar unos 2.5 millones de euros netos, un poco más del doble de lo que cobra ahora, una cantidad razonable viendo su rendimiento.