Antony solo quiere jugar en el Betis. Eso ya lo sabe todo el mundo, pero evidentemente su club, tiene mucho que decir en hecho. La intención del Manchester es clara, tras pasar al jugador.
Pero según leemos en ABC SEVILLA, no es el principal problema que tiene el club del Heliópolis. Lo más complejo se centra en el salario que el futbolista brasileño cobraría en el Heliópolis, en caso de que adquiriera la propiedad.
El Manchester no quiere una cesión simple, sino que quiere desvincularse definitivamente del futbolista, el Betis tendría que ajustar el sueldo al tope que se ha estipulado, que lo marca Isco.
Los dirigentes del Betis tendrían que cuadrar su sueldo, sin saltarse el tope que está marcado con el malagueño, es un asunto que preocupa, debido a que el límite salarial de la Liga es muy estricto.
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El planteamiento que se le haría el brasileño, en caso de alcanzar un acuerdo económico con el Manchester, algo que en el Betis son relativamente optimistas, es dividir su salario en más años de contrato, para evitar que superen los 3 millones de euros netos establecidos como límite.